Muestra las estructuras mentales del infante a través del aprestamiento lúdico antes de llegar al concepto numérico demostrando que desde los primeros años preescolares la muestra debe estimar en los niños el gusto por las matemáticas a través de actividades perceptivas que le permitan familializarse con el número y de esta forma cuando llegue a transición la adquisición del concepto abstracto del número y las demás operaciones se aprenda fácilmente.